8.08.2016

Y como siempre que llovió, paró... volví.

Es increíble re-leer las líneas que me brotaban hasta los dedos, cargadas de energía y sensaciones confusas. Es increíble como uno crece y deja atrás a muchas personas con sus respectivas manías, que se incorporaban en uno mismo y dolían. Nunca pensé que soltarlo me haría tan bien. 
Porque... yo estaba cómoda, en confort, sin desear, queriendo mucho y amando poco, viviendo instantes que ya no recuerdo, detalles materiales que ya no tengo, y expectativas que dejé atrás.
Cambié. Él me renovó. Y me encanta quien soy. En realidad, me encanta lo que siempre fui y no me dejaban ser. Fue así, que mis alas no crecían y es increíble como en tan poco tiempo, mis pies ya no están sobre la Tierra. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario