8.08.2016

Y como siempre que llovió, paró... volví.

Es increíble re-leer las líneas que me brotaban hasta los dedos, cargadas de energía y sensaciones confusas. Es increíble como uno crece y deja atrás a muchas personas con sus respectivas manías, que se incorporaban en uno mismo y dolían. Nunca pensé que soltarlo me haría tan bien. 
Porque... yo estaba cómoda, en confort, sin desear, queriendo mucho y amando poco, viviendo instantes que ya no recuerdo, detalles materiales que ya no tengo, y expectativas que dejé atrás.
Cambié. Él me renovó. Y me encanta quien soy. En realidad, me encanta lo que siempre fui y no me dejaban ser. Fue así, que mis alas no crecían y es increíble como en tan poco tiempo, mis pies ya no están sobre la Tierra. 

11.11.2015

{I really don't care}

Tiene un cartel de "CUIDADO" en la cabeza. 
Se los problemas que me puede traer.
Pero a este punto del partido, no me importa. 
Como yo tampoco le importo. 

Sumando

Sabiendo lo que significaba para mi, cayó muy bajo. Más que cualquier persona "muy dolida" en el mundo. 
Te haces un espacio, no lo pensas dos veces. Ya no entiendo tu cabeza, ¿Alguna vez pude?
Hay pequeños actos en grandes situaciones que hablan mucho de la persona con la que estuviste.
Siempre dije que eran diferentes, y más que nunca digo que lo son. 
Y yo que alguna vez, te elegí sobre tanta gente ¿Tan incorrecto eras?

10.26.2015

Cualquiera antes que vos.

Después de días hermosos, dijiste las palabras justas para partirme al medio.
Gracias. Ahora tengo los motivos perfectos para seguir diciendo:
CHAU.

10.19.2015

Si supiera que amagué todo el día para hablarle. 
Si supiera que su indiferencia me lo impidió...

10.18.2015

Un ángel más.




MoonÉl, viudo del amor de su vida, que la ayudó en cada paso de las peores situaciones, apoyado sobre la mesa, sin poder creerlo. Parecía fuerte ante la situación, pero cada vez que veía su mandíbula temblar, era notable que no siempre se puede guardar el llanto. 
Ella, sola sin su compañera de vida, su vecina, su mamá, lloró desconsolada un largo rato, hasta que pudo enderezarse y hablar. Yo tomé su mano, es lo único que pude hacer, soy la segunda mas chica con diez años de diferencia del primero, ¿Qué hacía ahí? ¿Qué podía hacer?
Él llegó a mi casa con la noticia fresca, le propusimos ir a visitarlos a ellos, y salimos. No emitía ningún sonido, ni lágrima, sólo no podía entenderlo. Cada vez que se expresaba lo hacía con una fuerza en sus gestos que determinaban su enojo. Pero creo que pudo asimilarlo todo cuando llegó. 
Sólo sé que las veces que lloré no significaron nada hasta que sentí el verdadero dolor de verlos a ellos. Pero por si fuera poco, ver a una de las figuras mas fuertes de mi familia quebrarse en sus abrazos. 
Él, viudo del amor de su vida, lo abrazó como nunca. "Se nos fue la madrina" le dijo, sin parar de llorar.
Ella, le dio las gracias. "Vos te acostaste en la camilla con ella cuando estuvo peor que nunca, y eso es algo que muestra mucho. Ella te adoraba, tenés que saberlo. Siempre amó a su ahijado."
Nunca contemplé y sentí tanto dolor, tan profundo que me inmovilizaba el cuerpo.
Nunca voy a entender las cartas que tira la vida. 
Pero el carrusel nunca deja de girar. 
Hasta siempre.
A la que me decía:
"¿Como anda la luchi?",
adiós para siempre, descansá tranquila.